Historia del Dr. José Gregorio Hernández (1864–2025)
El Dr. José Gregorio Hernández Cisneros nació el 26 de octubre de 1864 en Isnotú, estado Trujillo, Venezuela. Desde su infancia mostró una profunda fe católica y un gran amor por el estudio y el servicio. Se graduó de médico en la Universidad Central de Venezuela en 1888, y posteriormente se especializó en París, donde adquirió conocimientos avanzados en bacteriología, histología y microbiología.
Pionero en la medicina
A su regreso, fue pionero en la medicina científica en Venezuela y profesor universitario. Pero su mayor legado fue su caridad sin límites: atendía gratuitamente a los pobres, visitaba enfermos en sus casas y compartía su tiempo, conocimientos y recursos con humildad y alegría.
Intentó ser monje cartujo en Italia, pero por motivos de salud volvió a su país, aceptando que su vocación era servir como laico en el mundo. Vivió el Evangelio a través de su profesión, siendo luz para enfermos, estudiantes y necesitados.
El 29 de junio de 1919, murió en Caracas tras ser atropellado cuando se dirigía a ayudar a un enfermo. Su fallecimiento conmocionó al país entero. Desde entonces, el pueblo comenzó a invocarlo como intercesor ante Dios, y su fama de santidad se extendió por América Latina.
Beatificación
Su causa de beatificación fue abierta en 1948 y fue declarado Venerable en 1986 por San Juan Pablo II. En el año 2020, en plena pandemia, el Papa Francisco aprobó un milagro atribuido a su intercesión, y el 30 de abril de 2021 fue beatificado en Caracas, en una ceremonia histórica y profundamente devocional.
Durante años posteriores, miles de testimonios de sanación se multiplicaron. Y finalmente, tras la aprobación de un segundo milagro —relacionado con la sanación de un niño en estado terminal—, el Papa Francisco proclamó oficialmente santo al Dr. José Gregorio Hernández. La ceremonia de canonización se realizó solemnemente en Roma en 2025, poco antes del fallecimiento del Santo Padre.
Médico de los pobres: San José Gregorio Hernández
Así,
el Médico de los Pobres se convirtió en San José Gregorio Hernández, el primer laico venezolano canonizado. Su figura es hoy símbolo de fe, ciencia, caridad y humildad cristiana. Es invocado como
patrono de los enfermos, de los médicos y del pueblo que sufre.
Su imagen y su oración siguen recorriendo el mundo, recordándonos que la santidad no está lejos, sino al alcance de aquellos que aman profundamente a Dios y al prójimo.