Oración para Aceptar a Jesús, Inspirada en los Salmos
• por Claret Coromoto
Señor Jesús,
Tú que dijiste:
El Señor es mi pastor; nada me faltará
(Salmo 23,1).
Como el ciervo busca las corrientes de agua,
mi alma anhela contemplar Tu rostro
(Salmo 42,2).
Reconozco mi sed de Ti, mi sed de Vida,
y confieso mis pecados con el corazón contrito:
Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio,
y renueva un espíritu recto dentro de mí
(Salmo 51,10).
Jesús, Hijo de Dios vivo,
hoy te elijo como mi Señor y Salvador.
Te abro las puertas de mi corazón
y te recibo con gozo y gratitud.
Sé Tú mi luz y mi salvación:
El Señor es mi luz y mi salvación;
¿a quién he de temer?
(Salmo 27,1).
Perdona mis dudas, mis miedos y mis caídas.
Como el salmista exclamó:
Vuélvete, Señor, y libra mi alma;
sálvame por tu misericordia
(Salmo 6,4),
así confío en tu compasión.
Jesús, abrazo tu Cruz y tu Resurrección.
En Ti hallo fuerza para caminar
y esperanza para renacer cada día.
El Señor da fuerza a su pueblo;
el Señor bendice a su pueblo con paz
(Salmo 29,11).
Espíritu Santo, ven a habitar en mí,
hazme templo de la presencia divina.
Que mi vida refleje el canto agradecido:
Bendeciré al Señor en todo tiempo;
mi boca proclamará tu alabanza
(Salmo 34,1).
Amado Jesús, gracias por amarme primero, por morir por mí y resucitar para mi salvación. Toma mi voluntad, mis sueños y mis luchas; haz de mí un instrumento tuyo para llevar tu amor a todos.
Hoy sello mi compromiso: eres Tú mi Pastor, mi Rey y mi Amigo. En tu iglesia y en tu palabra quiero morar, hasta el día en que camine contigo en la gloria eterna.
Amén.